El mundo del té ha experimentado un renacimiento en popularidad en los últimos años, y dentro de este auge, el té matcha ha ocupado un lugar destacado. Sin embargo, es común que muchas personas confundan el té matcha con el té verde, ya que ambos provienen de la misma planta: Camellia sinensis. Aunque comparten algunas similitudes, existen diferencias significativas en la forma en que se cultivan, se procesan y se consumen. A continuación, desglosamos las diferencias clave entre estos dos tipos de té.
Procedencia y cultivo
El té verde y el té matcha provienen de la misma planta, pero el matcha es un tipo específico de té verde. La diferencia comienza en cómo se cultivan las hojas:
- Té verde: Las hojas de té verde se cultivan al sol, lo que permite que desarrollen su sabor natural y características típicas. Después de la cosecha, las hojas se secan rápidamente para evitar la oxidación.
- Té matcha: Para producir matcha, las plantas se cubren con sombra durante aproximadamente tres semanas antes de la cosecha. Este proceso aumenta la producción de clorofila y aminoácidos, lo que da como resultado un sabor más dulce y umami. La hoja también se muele finamente hasta obtener un polvo fino, lo que conserva todos los nutrientes.
Proceso de preparación
- Té verde: El té verde se puede preparar de diferentes maneras, pero el proceso más común es infusionar las hojas secas en agua caliente. El tiempo y la temperatura de preparación varían según el tipo de té verde.
- Té matcha: A diferencia del té verde, en el té matcha no se infunden las hojas, sino que se consume el polvo directamente mezclado con agua caliente o leche, lo que permite aprovechar toda la hoja de té, incluida su fibra, antioxidantes y nutrientes.

Perfil nutricional
El principal beneficio del matcha sobre el té verde es su concentración de nutrientes. Debido a que se consume toda la hoja en forma de polvo, el matcha contiene:
- Antioxidantes (catequinas): El matcha contiene un nivel mucho más alto de catequinas, especialmente EGCG (epigalocatequina galato), que es conocido por sus poderosos efectos antioxidantes y anticancerígenos.
- Aminoácidos: El matcha tiene niveles más altos de L-teanina, un aminoácido que promueve la relajación sin causar somnolencia.
- Fibra: Al consumir la hoja entera, el matcha ofrece más fibra dietética que el té verde.
Efectos sobre la salud

Ambos tipos de té tienen propiedades que promueven la salud, como la mejora del metabolismo, la protección contra enfermedades cardíacas y la mejora del enfoque mental. Sin embargo, debido a su mayor concentración de nutrientes, el matcha es más potente en estos efectos. Además, la combinación de cafeína y L-teanina en el matcha ofrece una energía más equilibrada y duradera, sin los picos y caídas abruptas que a veces produce el café.
Conclusión
Mientras que el té verde es una excelente opción para quienes buscan una bebida refrescante y saludable, el té matcha lleva los beneficios del té verde al siguiente nivel. Si buscas una experiencia más rica y concentrada, y deseas aprovechar al máximo los nutrientes del té, el matcha es la opción ideal.